Miembro informante del oficialismo, quien presidió la Bicameral que trabajó en la nueva fórmula jubilatoria, Marcelo Casaretto, resaltó el trabajo realizado durante las 17 reuniones que se realizaron y de las que participaron 60 legisladores de todos los bloques y 24 expositores invitados.
“Terminamos en un informe de 131 páginas que pusimos a consideración de la sociedad”, señaló el legislador al tiempo que precisó que en base a eso “el Presidente días después elaboró un proyecto; el Senado le incorporó luego algunos aspectos adicionales y hoy estamos aquí debatiéndolo”.
Respecto del proyecto, Casaretto explicó que se propone modificar el esquema de movilidad que tiene una incidencia directa sobre 7 millones de jubilados y pensionados y también de manera indirecta sobre 17 millones de beneficiarios de políticas sociales.
“El objetivo de este Gobierno es que crezcan la Argentina y los beneficios del crecimiento lleguen a los trabajadores y los jubilados. Por eso vinculamos con dos variables esenciales: salarios de trabajadores en actividad y con la mejora en la recaudación”, detalló.
Vale aclarar que la vinculación con los salarios de los trabajadores tiene en cuenta dos indicadores: el RIPTE, que considera los salarios en blanco, y la vinculación del INDEC con salarios formales e informales. “Y le daremos lo que sea la mayor de esas variables, convencidos de que a partir de la recuperación económica, hay que discutir las paritarias y tiene que haber mejoras para los trabajadores y que esas mejoras también lleguen a los jubilados”, expresó el entrerriano.
En cuanto a la recaudación, Casaretto dijo que “sabemos que hubo problemas en 2018 y 2019, y también en este 2020 por la pandemia. Pero vemos que la recaudación está aumentando y en los últimos meses fue por encima de la inflación”.
El diputado nacional sostuvo que el Presupuesto estima un crecimiento del 5% para la Argentina para el año que viene: “Si la vacunación que hoy comienza es exitosa, la recuperación puede ser aun más intensa y queremos que esos beneficios lleguen a los jubilados”, puntualizó.
Luego recordó que hubo dos fórmulas que tuvieron vigencia en las últimas décadas: “La de 2008, que les permitió a los jubilados mantener el poder adquisitivo y mejorar un 26% el poder adquisitivo; y la de 2017, que hizo que dos años después los jubilados perdieran un 19% frente al poder adquisitivo, si lo medimos en términos de inflación”.
Para Casaretto, “esta es una muy buena ley para los jubilados y los argentinos, y el tiempo nos dará la razón”. Y en ese sentido concluyó solicitando: “No me den la razón, denme tiempo y el tiempo me va a dar la razón”.