La ley de Alcohol Cero, luego de su media sanción en Cámara de Diputados, fue uno de los principales motivos que paralizó la actividad en el Senado. Pese al impulso que intentó darle el Frente de Todos en sesiones extraordinarias, la resistencia del sector vitivinícola y el desplante de la oposición en la última sesión legislativa impidió su tratamiento en el recinto.
Sin embargo, este jueves la ley fue aprobada definitivamente por 48 votos contra 9. Las disputas durante más de dos horas en torno al Alcohol Cero contrastaron con una jornada en donde se sancionaron otros siete proyectos por acompañamiento unánime de todos los legisladores.
La norma tratada sustituye el artículo 48 de la ley de Tránsito 24.449 y contempla reducir de 0,5 a 0 miligramos la cantidad de alcohol por litro de sangre que puede tolerarse para conducir. La “tolerancia cero” con el alcohol ya se implementaba en siete provincias y 13 localidades del país.
Si bien JxC pedía excluir esta iniciativa del temario, seis senadores radicales finalmente decidieron apoyar el tratamiento del proyecto e hicieron su propia convocatoria para este jueves 13 de abril, incluyendo la ley que busca prohibir la presencia de alcohol en sangre durante la conducción de vehículos.
Por su parte, el oficialismo ese encolumnó a favor del proyecto, pero hubo rechazo por parte de legisladores del PRO y los senadores de San Juan y Mendoza. Se trata de provincias cuyos ingresos dependen fuertemente de la actividad vitivinícola.
En ese sentido, la senadora riojana María Clara Vega se sinceró “como integrante de una provincia con una economía regional importante, como es la vitivinícola, he recibido presiones y mensajes respecto a que estaba apoyando una ley que iba en contra del trabajo de los riojanos. Me parece que ese es un desconocimiento total de a lo que aspira esta ley”. “Nosotros queremos limitar el consumo del alcohol al volante. Nadie está impulsando una ley seca”, añadió.