Dos iniciativas ingresadas en la Cámara de Diputados de la provincia proponen la sustitución de la tracción a sangre en todo el territorio entrerriano. Los proyectos de Carina Ramos (Frente CREER) y Esteban Vitor (PRO), que contienen algunas diferencias pero tienen el mismo fin, deberán ser tratados oportunamente en la comisión de Legislación General.
“La idea es trabajar los dos proyectos de manera unificada para avanzar en un texto legal que nos permita abarcar esta temática”, indicó Ramos en diálogo con Bicameral.
“En el caso de la tracción a sangre debemos erradicarlo de de manera definitiva, pero teniendo en cuenta las circunstancias en las que se lleva adelante. Priorizando los derechos humanos de las personas en situación de vulnerabilidad, que están detrás de la tracción a sangre”, expresó la diputada.
El proyecto de Ramos apunta a lograr la “reconversión de la tracción a sangre”, a través de un programa específico que tendrá un plazo de dos años para realizar este trabajo.
El proyecto de ley se plantea como un complemento de la Ley N° 10.151 de Régimen de Fomento y Promoción de la Economía Social, y tiene como objeto “la reconversión de la tracción a sangre mediante programas de inserción laboral, aprendizaje de oficios, emprendedurismo, o sustitución por herramientas de trabajo, para el empoderamiento de las personas en situación de vulnerabilidad social y económica, y la gradual y permanente erradicación de vehículos de tracción a sangre”.
La autoridad de aplicación, en la iniciativa de Ramos, sería el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia y los municipios entrerrianos deberán adherir. A su vez, se crea un Consejo Asesor Multisectorial y se dispone un fondo específico, creado a partir de montos asignados en el Presupuesto, donaciones, aportes por convenios y el 5 por ciento de las utilidades netas por juegos y apuestas del Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (IAFAS).
El proyecto de Vitor, que cuenta con el acompañamiento de la mayoría del interbloque de Cambiemos, propone cambios a la Gestión Integral y Coordinada de Recolección de Residuos Urbanos para promover la “sustitución y definitiva eliminación de la tracción a sangre”, apuntando también a erradicar la precariedad y el trabajo infantil.
En la iniciativa también será el Ministerio de Desarrollo Social la autoridad de aplicación de la norma, y se propone la sustitución de la tracción a sangre por “vehículos de tracción motora que ofrezcan una alternativa laboral superadora” o de otros programas.
Una vez que el Estado haya entregado los vehículos, los municipios deberán según este proyecto establecer prohibiciones al tránsito de vehículos de tracción a sangre. A su vez, serán los gobiernos locales quienes realicen un censo para el Registro Único de Recuperadores Urbano.
En los fundamentos, Vitor recuerda que el proyecto ya fue presentado en 2016 y que no obtuvo tratamiento, y el motivo de su nueva presentación es el ingreso de una iniciativa que “aborda la temática de referencia”.
“Es un tema que hemos hablado con la oposición, y la idea es trabajar en consenso“, sintetizó Ramos, quien calculó que el tema estará entre las prioridades de la agenda legislativa el próximo año.