Por M. G. (*)
Dirigentes radicales con aspiraciones a nivel provincial comenzaron a apurar definiciones frente a una noticia que podría reordenar el tablero político en la coalición opositora: el lanzamiento de la candidatura de Rogelio Frigerio, exministro del Interior y conductor del aún incipiente PRO entrerriano.
Si bien el dirigente, que pasó gran parte de la cuarentena en su campo del departamento Islas, dejó en claro que no le interesa demasiado ocupar una banca en la Cámara de Diputados, sí confirmó lo que hasta el momento era un secreto a voces: su intención de encabezar una boleta en 2023 bajo el proyecto que a nivel nacional conducirá Horacio Rodriguez Larreta.
Esta hoja de ruta trazada por Frigerio motivó respuestas -algunas veces concretas, otras solapadas- de dirigentes radicales con aspiraciones.
“En Entre Ríos, al igual que a nivel nacional, debemos cuidar la unidad de Juntos por el Cambio y fortalecer a los partidos que lo integran. En nuestra provincia el radicalismo tiene la responsabilidad de seguir siendo la columna vertebral de una coalición que debe prepararse para gobernar”, sugirió el radical Atilio Benedetti, uno de los tres legisladores de la oposición que este año deberá revalidar en las urnas su banca en Diputados, si así lo desea.
Benedetti conduce a un sector importante de la UCR y ha participado en todas las elecciones desde 2009, excepto aquella en la cual bajó su candidatura a la gobernación para allanarle el camino a Alfredo de Angeli. Hasta el momento, nada indica que 2021 vuelva a ser una excepción.
El otro radical que desde hace algunos meses viene levantando el tono de sus declaraciones es el diputado Jorge Lacoste. Entre sus actividades de 2020 hay charlas virtuales con dirigentes del radicalismo crítico, como Federico Storani, Ramón Mestre o Changui Cáceres, y también abrió el juego a peronistas como Julio Bárbaro y Emilio Martínez Garbino. En todas esas actividades lo secundó el presidente del comité provincial de la UCR, Leandro Arribalzaga.
En uno de esos encuentros dialogaron sobre la necesidad “de recuperar a la Unión Cívica Radical, el debate dentro del partido y la posibilidad de hacer una construcción que vaya desde abajo hacia arriba expresando el sentimiento de los radicales de distintos rincones de la provincia y del país en el caso de lo nacional”.
El diputado termina su mandato en 2021 y, más allá de su futuro personal, viene adelantando cuáles serán los planteos de un sector del radicalismo entrerriano renuente a protagonizar otro ciclo de sumisión política al PRO.
Por otro lado, son dos los intendentes de Juntos por el Cambio que se perfilan para las próximas elecciones ejecutivas, aunque este año en las legislativas podrían dar pistas respecto a qué futuro avizoran para el centenario partido dentro de la coalición. Uno es Darío Schneider, intendente de Crespo, de buena llegada con sectores del PRO de la capital entrerriana, y el otro es Pedro Galimberti, intendente de Chajarí quien, a pesar de sostener la necesidad de consolidar Juntos por el Cambio, no desdibuja su perfil radical.
En una entrevista radial replicada en su cuenta de Twitter, el intendente de la localidad del norte entrerriano dejó en claro cuáles son sus aspiraciones, más allá del prematuro lanzamiento de Frigerio: “Yo creo en los caminos de construcción. Y a mí siempre me gusta liderar“, afirmó.
Otro intendente radical que atraviesa su segundo mandato es Bruno Sarubi, de La Paz, quien hasta ahora ha optado por un perfil más bajo. Uno de sus promotores es el intendente de Bovril, Fabián Valenzuela, quien viene criticando abiertamente a la conducción partidaria de Atilio Benedetti.
Hace algunos días, durante la visita del gobernador Gustavo Bordet para inaugurar viviendas, dejó una definición con un destinatario preciso: “Siendo de color político distinto y habiendo sostenido el gobierno nacional tuvimos esta obra parada durante cuatro años. Lamentablemente 54 familias tuvieron que esperar para tener su casa propia”, deslizó. En ese entonces, el ministro del Interior era Frigerio.
Días atrás, antes de cerrar el año, intententes y exintendentes -algunos de ellos actuales legisladores- se reunieron para conformar un nuevo espacio en el radicalismo, donde confirmaron la voluntad de ser protagonistas en la etapa que viene.
El año electoral recién comienza, pero en el centenario partido son muchos los dirigentes que no quieren perder tiempo.
(*) De la Redacción de Bicameral