Tal cual lo prevé la constitución, el gobernador Rogelio Frigerio abrirá el sábado 15 de febrero a las 18 en el Centro Provincial de Convenciones (CPC) de Paraná un nuevo período de sesiones ordinarias de la Legislatura. Será su segundo discurso ante la Asamblea Legislativa, tras un año de intenso trabajo en ambas cámaras, que se extendió incluso durante el verano.
Se espera que el discurso del gobernador esté fuertemente anclado en lo que consideran desde su gestión ha sido un reordenamiento del Estado provincial durante su primer año al frente del Poder Ejecutivo. Se aguardan alusiones a su iniciativa para dar de baja contratos irregulares, su plan de estabilidad para empleados con convenios de obra y su esquema de administración basado en la austeridad como punto de partida para lograr equilibrio fiscal.
En lo legislativo, en tanto, el exministro del Interior seguramente hablará de proyectos impulsados desde el Poder Ejecutivo, algunos de los cuales fueron aprobados en las cámaras durante el pasado año: la reforma de ministerios, la nueva Ley de Agroquímicos, la Ley de Telecomunicaciones y la Reforma Política -sancionada sobre el fin de año, con la Boleta Única Papel como eje-, entre otros, serán parte de lo que mencione el gobernador.
Cabe destacar que Frigerio ya anticipó que hubo un lote de iniciativas que habían quedado sin tratar que seguramente serían debatidas este año y anunció también, por ley, una rebaja de tributos. Esa norma, junto a otras, como la reforma de la norma que rige el Consejo de la Magistratura y las modificaciones que debaten por estas horas en el Senado al Código Fiscal, también estarán posiblemente entre las expresiones del sábado próximo.
El discurso de Frigerio estará cruzado por un contexto nacional donde, si bien hay estabilidad económica, nuevamente las provincias no cuentan con un Presupuesto aprobado. Por ende, dependen exclusivamente de la voluntad de la Casa Rosada, que distribuirá las partidas como Javier Milei y su equipo económico consideren. A la par, se abre un nuevo escenario electoral, con la incógnita de un posible acuerdo entre Juntos por Entre Ríos y la Libertad Avanza, para pasar de una elección de tercios definitivamente a una contienda polarizada.