El jefe del bloque de diputados radicales, Rodrigo de Loredo, confirmó este viernes la decisión de su bancada de aprobar la ley de Bases y el paquete fiscal, tal cual salieron el 30 de abril pasado de la Cámara baja. Esta decisión adoptada por los legisladores radicales es clave y va en sintonía con el interés expresado por el oficialismo por ratificar la media sanción original, por sobre las modificaciones del Senado.
El anuncio lo hizo el presidente del bloque radical a través de un largo posteo en su cuenta de la red social X, donde explicó esa decisión marcada en 15 puntos detallados. Allí arrancó con este anuncio que no deja dudas sobre el destino de la mayoría de los votos de este bloque de 34 diputados: “Vamos a aprobar la ley Bases y el paquete fiscal como ya lo hicimos y como ya intentamos hacerlo en enero”.
“Vamos a aprobar nuevamente la ley por dos razones centrales -comenzó-. La primera y fundamental, es porque los textos están bien, sirven al Gobierno y mejoran cosas en la Argentina”. Y enumeró: “Las delegaciones son razonables. Privatizar empresas es necesario ante el mal manejo y los elevados déficits que pagan los argentinos con sus impuestos. Los cambios en el paradigma hidrocarburífero prometen aumentar la producción. El régimen atractivo de inversiones compra una estabilidad que la Argentina no tiene y el paquete fiscal le da al gobierno herramientas para su programa económico”.
La segunda condición por la que los radicales se inclinan por apoyar ambas leyes es que ello representa “un aporte democrático para un gobierno que no ha podido sacar una ley desde que asumió hace 6 meses. Tiene que contar con las herramientas para llevar a cabo su programa. Y, fundamentalmente, tenemos que de una vez dar vuelta esta página y superar esta primera etapa del Gobierno”.
No hay que confundirse, aclara De Loredo en su posteo: “El superávit fiscal es solo un medio, el objetivo es el superávit productivo. Porque el riesgo es que el ajuste de la nada sea la nada misma. Para eso, se debe lograr con expectativas y decisiones inteligentes, reactivar la economía que tiene una profunda recesión que exhiben todos los indicadores”.
Para el radical cordobés, “las decisiones que nos trajeron hasta acá no son las mismas que se necesitan para los desafíos presentes y futuros. Los indiscutibles logros económicos de baja inflacionaria, superávit, disminución de la brecha, acumulación de reservas y reducción del riesgo país, se obtuvieron con decisiones carentes de gestión precisa. De manera que lejos estuvo de ser la casta la que pagó la mayor parte del ajuste, impactó en su totalidad sobre los sectores medios y los adultos mayores”, estimó, y remarcó entonces: “Aprobar esta ley resulta indispensable para salir de las trabas y avanzar hacia el futuro”.
“Los desafíos no son pocos y van a requerir de una gestión técnica que el Gobierno no ha exhibido hasta ahora -continuó-. El atraso cambiario, el cepo, la continuidad del plan tarifario, manteniendo equilibrios en las cuentas, son los desafíos inmediatos. El mayor de todos es frenar la pérdida de empleo. La sociedad ya está más preocupada por el desempleo que por la inflación”.